Fábula.

El Rey y el Buey

Una vez existió un rey,
del cual nadie conocía so nombre.
Una vez hubo un buey,
al que cambiaron por cobre.

El rey angustiado se encontraba,
porque ya no recordaba como se llamaba.
El buey tristemente presentía,
que se convertiría en comida.

El pueblo no conocía a su soberano,
al cual sus tributos brindaba.
El rey no poseía hijos, ni hermanos,
solo en la vida se hallaba.

El rey desde las sombras, hizo un comunicado,
quién le recuerde su nombre, será venerado.
Entonces, el buey se libró de sus ataduras,
y llegó hasta el castillo mostrando su bravura.

Y entre la multitud gritó:
_ yo se cual es el nombre del rey!
Y toda la gente rió,
pues, que puede saber un buey.

El rey desde las sombras preguntó:
_ dime entonces como me llamo!
Y el buey con ansias respondió:
_ tu te llamas como yo me llamo,
Leo me llamo yo y tu también!
_ Es cierto_ dijo el rey _ ahora creo que recuerdo bien!
_ Pues como sabe su nombre, este animal?,
preguntó la multitud, sin desconfiar.

_ Yo se su nombre, por que el rey soy yo,
con gran asombro todo el mundo oyó.
Y desde las sombras salió un viejo,
que ante aquellas palabras quedó perplejo.
_ Aquí yo soy el emperador,
dijo el anciano con un sin sabor.

Pero a quién le creería la gente,
a aquel buey del monte,
que nunca estuvo escondido,
o a un viejo hombre desconocido.

Así aquel rey, se quedó sin reino.
Así aquel buey, se ganó su premio,
convenció al viejo de que se llamaba Leo,
y engaño a todo un pueblo con su juego.

Guiye.
12/01/2006.